Aunque parezca inconveniente nos permitimos insinuarle a la Alcaldia la idea de habilitar uno o varios carretones-estanques destinados a vender a precio bajo agua de buena clase en las pensiones i casas particulares del pueblo.
Nadie se negaria a pagar un precio módico por el agua i el valor que se obtuviera compensaría con creces los gastos de esos servicios.