Porque si dijéramos el 53 % de los chilenos -al menos- va mejorar su nivel de vida, entre otros aspectos, eso sería casi justo.
Por otra parte -aún para quienes estuvimos por la alternancia- ¿quién no espera lo mejor para su país? Difícil pensar que haya algunos que quisieran lo peor. No obstante es legítimo tener aprensiones en cuanto al desempeño de la próxima gobernante, por el séquito que seguirá acompañándole, pese a sus “aclaraciones” repitiéndose el plato y comiendo de lo mismo. ¿O creen que algunos que están años con la “teta” la desean soltar? Y si no es así, ¿por qué estaban tan preocupados, con colitis antes de las elecciones?
Algunos -en cargos políticos, en que su labor es hacer permanente proselitismo en su “trabajo”- están cortando SUELDOS nada de despreciables, que en nada se condicen con quienes votan por ellos. Es decir el comun de los chilenos. Algunos, incluso, al menos tienen un par de “entradas”.
Y que quede claro: Las aprensiones sobre la futura gestión no son por su calidad de mujer, sino por aquellos que ahora más que nunca están afilándose los dientes. Que diga la recién electa Presidenta que va a tener independencia para elegir su gabinete, sus equipos, es un decir que raya en la ingenuidad y candidez; pues los partidos de la coalición son los que le van a mandar sus listados de militantes como “candidatos” a los diferentes cargos, donde Michelle Bachelet va a elegir a sus colaboradores; pero del listado que se le haga llegar.
¿Cómo resolverá los equilibrios? Este factor será una olla de grillos, sin duda. Porque cual más, cual menos, estimará que “se merece” una mayor cantidad de militantes en el aparataje estatal. Y por cierto, las granjerías y garantías que significa “manejar” cada servicio del estado, en las diferentes regiones, será un botín muy preciado que será disputado con dientes y muelas por los iluminados de cada partido.
Ficción y realidad
Nunca antes el Canal 13 y Televisión Nacional habían acertado en los nombres de sus teleseries -ya anunciadas para el primer semestre- donde estamos viendo en sus pantallas que DESCARADO y CÓMPLICES, respectivamente, calzan perfectamente con la realidad que han significado el período electoral, tanto de Diciembre, como de la segunda vuelta presidencial.
No sé si sea coincidencia o haya una suerte de plagio entre los canales de televisión indicados y el gobierno, ¿porque quiénes más “descarados” que los funcionarios de gobierno en el intervensionismo, proselitismo y propaganda en beneficio de la abanderada de la concertación?
Para la elección de diciembre hubo reparto al menos de cajas de mercaderías.
¿Es mentira? O fueron Viejitos Pascueros los que repartieron diversos regalitos -al menos en nuestra región- que volvieron a otorgarse en días previos al acto eleccionario.
Al menos en la Gobernación Cardenal Caro tres o cuatro cajas de mercaderías quedaron “rezagadas”.
Y algunos tienen cara de decir: “El proceso electoral ha sido ejemplar, limpio, transparente; quedando una vez más reflejado la solidez de la democracia ….”
¡Ah!, y a raíz de la circulación del periódico El Expreso de la Costa una autoridad -cuando vio su contenido- dijo AQUÍ HAY UNA ABIERTA INTERVENCIÓN, refiriéndose a un artículo de opinión.
Será ello quizás lo que causó la NOTABLE DIFERENCIA en la votación entre Piñera y Bachelet, acá en Pichilemu: Solo 9 votos de ventaja para Michelle Bachelet.
Ese es el fiel reflejo, nada más, de la excelente gestión que sus autoridades están haciendo en la comuna.
Aquí más que un deseo de ver a una u otro al mando del país por los siguientes cuatro años, hay -también- un deseo de demostrar su descontento con las autoridades locales. ¿O no? ¿O acaso es el reflejo de sus votaciones?
