Tras una extensa y extenuante jornada de ponencias y discusiones –no exentas de tensión- culminó el Seminario Nacional Medio Ambiental organizado por la Agrupación Ciudadana por un Pichilemu Limpio. ACPL, con participación de representantes de ciudades y localidades afectadas y que han sido conflictuadas por proyectos contaminantes.
La jornada de hoy, terminó –como ya dijimos- con las palabras finales del presidente de la ACPL, Luis Pavez, hace pocos minutos; exactamente a las 19.45 horas, agradeciendo la asistencia de quienes fueron partícipes de esta jornada ciudadana –de ayer- y del Seminario Nacional –de hoy- señalando que “estamos dispuestos a seguir conversando con la empresa, para buscar una mejor solución al problema medioambiental”, agregando enseguida “hemos superado con creces las espectativas, pese a que no asistieron todos los representantes de ciudades y localidades invitadas, sin embargo, igualmente nos sentimos satisfechos. Muchas gracias”.
Segundos antes, el gerente de la empresa ESSBÍO, señaló: “Ha sido una experiencia muy dura, pero ha sido muy buena. Quiero agradecer esta oportunidad. Se que no hemos sido lo suficiente creativos para informar de nuestro proyecto, que tengan dudas sobre él, pero quiero decirles sinceramente que tras él, hay buenas intenciones”.
EXPONENTES
Durante toda la mañana –y tras un breve descanso para almorzar- durante la tarde expusieron diferentes representantes, cuyos nombres aún no conocemos, pero que esperamos los organizadores nos los entreguen, para informar más detalles.
Podemos señalar sí, que parte de la exposición del destacado deportista –Nicolás Recordón Martin- que reside desde hace más de una década en Pichilemu dio a conocer sobre las características de la OLA de Pichilemu, como de los movimientos de las arenas a raíz de las corrientes marinas y de la incidencia de fenómenos en lugares muy distantes, en el comportamiento de la bahía pichilemina, apoyándose en fotografías.
También participaron del debate, el surfista pichilemino y campeón nacional Ramón Navarro, quien espetó a un profesional de la empresa ESSBÍO que “usted podrá decirme que según sus estudios el número x más el número x dan un resultado; pero yo le puedo decir sobre lo mismo que llevo metiéndome día a día al agua y he visto que las arenas hoy están aquí, y al día siguiente están más allá, que hoy la profundidad en determinado lugar puede ser cinco metros y mañana sean dos. Eso lo he visto, lo he vivido, lo he comprobado. Yo no tengo los argumentos científicos para decirle cómo ocurren, pero ocurren. Y un estudio de un par de meses o más no me van a decir que es un estudio serio que asegure lo que dice el Estudio de Impacto Ambiental realizado por la empresa sanitaria. Y esa experiencia de vida, de más de quince años surfeando se la pueden repetir otros, como los buzos y pescadores que llevan más tiempo que yo en el mar”.
También fueron mencionados los surfistas Cristián Aguirre, Fernando Zegers y un representante de la Agrupación Pro-Playa, entre otros.
HITO
Cadudzzi Salas, uno de los organizadores que tuvo una de las mayores responsabilidades en la conducción del desarrollo de las dos jornadas, vivió una experiencia agotadora, pero no por ello, menos interesante. Fue el moderador, quien tuvo que poner orden, dar la palabra e intervenir cuando el apasionamiento llevó a la tensión.
Justamente, logramos captar una de sus intervenciones, donde señaló: Estamos en un escenario que –nos guste o no- tenemos que aceptarlo en el ámbito de conversar y respetarnos con la empresa que es la que tiene la concesión del servicio. Si bien la comunidad está sometida a esta “camisa de fuerza” que impone la legislación al respecto, ello no significa que no podamos manifestar nuestras discrepancias y nuestras aprensiones”, para acto seguido, indicar que “aquí en Pichilemu hay muchos habitantes, cientos que han trabajado toda su vida construyendo, desarrollándose en torno al mar, al turismo, y hoy con este proyecto ven con impotencia, con dolor que ese patrimonio tan preciado como es el mar, será intervenido, provocando un daño que no solo ellos ven como irreparable. Sin embargo, debemos decir que si bien la empresa sanitaria tiene la concesión para desarrollar su negocio, debemos apelar a un conceptoque felizmente algunas empresas están aceptando. Es un concepto que no se nos ha ocurrido a nosotros, es un concepto que está siendo aceptado en todo el mundo. Esto es el CONCEPTO DE LA RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL. Esto significa una acción empresarial responsible donde las inversiones se compatibilizan entre el interés de la empresa y el de las comunidades, haciendo más armónico el desarrollo”.
Cadudzzi Salas concluyó sus palabras: “Sin duda hemos sentado un precedente, un hito. Y el hecho que estemos sentados conversando –entre actores e intereses diferentes- es un precedente importante. Ojalá que a partir de mañana empecemos a construir una solución diferente”.