Una declaración pública -tal como fue anunciado- sacó el Directorio del Cuerpo de Bomberos de Pichilemu, para explicar respecto a la Torre para su nueva sirena -y que a la vez serviría para instalar allí una antena para telefonía móvil- los alcances del acuerdo con una empresa, como también puntualizar sobre la realidad económica de la institución y del apoyo que brinda la comunidad y las autoridades comunales.
En efecto, en el cuartel de la institución fueron convocados diversos medios de comunicación, para entregar una comunicación de cuatro páginas tamaño oficio, como igualmente mostraron otros antecedentes, a fin de informar oficialmente sobre el tema que estaba sentado en la opinión pública desde hace unos días; anunciando de paso, que ese comunicado será el único que entregarán, dejando lo demás a otras instancias.
ANTENA
Todo se suscitó -indican- a raíz de la necesidad de instalar la nueva Sirena -de 200 kilos de peso, de un valor de más de tres millones de pesos, entregada por el Gobierno Regional- tras aprobar un proyecto para su adquisición.
Informan que los recursos que ellos recaudan -a través de la campaña del Sobre, cobros de Aparcamiento en la temporada de verano y otras actividades- no les alcanza para cubrir apenas los costos de operación.
Tenían hace un año guardada la Sirena sin poder instalarla, ya que por su peso requiere una torre que de seguridad y tras cotizar una, la más barata tiene un costo de ocho millones imposibles de solventar, porque lisa y llanamente no tienen los recursos para ello. Y, por tanto, buscando cómo financiarla, surgió el gentil ofrecimiento de la empresa ENTEL, de instalarla ellos, a cero costo, a cambio de instalar -ellos- en la misma torre antenas para telefonía móvil, para lo cual informaron a Bomberos “que ellos estaban autorizados por los organismos competentes para el tema”, faltando solo la autorización para “el cambio de la Torre, trámite que nosotros hicimos en la Direcciòn de Obras Municipales”.
Estando así las cosas, dice Bomberos, “firmamos un contrato de arriendo con ENTEL por un período de 10 años, de un espacio de su propiedad (Cuartel) para que la empresa instale allí la Torre con los fines mencionados”.
A reglón seguido, precisan que además el contrato estipulaba un pago mensual de 450 mil pesos, lo que permitía solventar obras urgentes en el cuartel, inmueble que -por su data de construcción- tiene una serie de daños.
En el siguiente párrafo, Bomberos indican que en las conversaciones con el representante de la empresa ENTEL, este enfatiza que no existe ningún impedimento para instalar la antena, ya que ellos contaban con las autorizaciones correspondientes, y “de los cual nosotros como institución no teníamos porqué dudar”.
Pese a ello, reconoce Bomberos que la situación salta a los medios de comunicación, haciéndose eco algunos miembros de la comunidad y que luego, también, el municipio procede a detener las obras, hasta que la empresa ENTEL resuelva la situación, especialmente el tema de los permisos pertinentes.
En el siguiente párrafo, Bomberos dice que ante los hechos sucedidos “venimos a aclarar a la comunidad, que en ello no tenemos ninguna responsabilidad, que no sea el aceptar un contrato con la empresa ENTEL por un espacio de terreno de nuestra propiedad”.
Es más, precisan que “las autorizaciones y permisos correspondientes, ante las instituciones, ya sean gubernamentales, municipales, para la instalación de una antena de telefonía móvil, corresponden directamente a la empresa ENTEL y no a Bomberos”.
Manifiestan al respecto, que “las acciones que se tomen por parte de las autoridades correspondientes , con relación a la instalación o no instalación de la antena de telefonía móvil, serán acatadas en forma inmediata por Bomberos”.
Enseguida indican que, “no ha sido nuestro ánimo pasar por encima de la Ley o reglamentos que rigen en la comuna”, al tiempo que señalan que “nosotros nos limitamos a arrendar una parte del terreno que es de nuestra propiedad”.
Y LA COMUNIDAD
A continuación, Bomberos se pregunta: ¿Por qué Bomberos tiene que llegar a esta situación? ¿cuál es la responsabilidad de la comunidad y especialmente de las autoridades con respecto a la situación que está viviendo su Cuerpo de Bomberos?
Acto seguido informa que el cuartel se está cayendo a pedazos y que se necesitan urgentemente 11 millones de pesos para repararlo.
Como también, dan a conocer las pésimas condiciones de la camioneta que usan para las emergencias y para el traslado de la oficialidad, preguntándose si acaso ¿hay que esperar que ocurra un accidente para renovar este vehículo?
Asimismo, recuerdan que la campaña del Sobre y otras actividades apenas alcanzan para cubrir el 50% de los gastos anuales que significa tener operativo a la institución, que dispone de dos compañías, en tanto tienen que seguir -dicen- mendigando por el restante 50%.
No deja de llamar la atención, lo que está pasando con la Municipalidad de Pichilemu. “Hace varios años ya, que Bomberos no recibe aporte alguno de parte del municipio, siendo el único aporte el trabajar el Aparcamiento en la Avenida Costanera hasta el año 2005, traspasar ese dinero ganado a la Municipalidad, para que èsta lo entregue muchos meses después, y después de mucho exigir, exigiéndonos la presentación de un proyecto para entregarnos el dinero a través de una subvención”.
Informan enseguida, que el año pasado después que les negaron la entrega de la Av. Costanera para trabajar el Aparcamiento (cobro de Parquímetro), Bomberos les solicitó un aporte de 5 millones de pesos. “Monto que después de muchas conversaciones quedó en un aporte de 3 millones 500 mil pesos, sin embargo hasta la fecha no lo hace efectivo a Bomberos”.
El comunicado termina solicitando la comprensión a la comunidad y justificando que obligado por las circunstancias de precariedad económica en que se desenvuelve la institución, los obligó a arrendar parte de los terrenos del cuartel. Al tiempo que manifiestan que “de no ser factible la instalación de la antena en nuestra propiedad, le corresponde a ustedes, especialmente a las autoridades buscar la solución y los fondos para instalar la Torre (y la Sirena). Creemos que ya es tiempo que la Municipalidad se haga cargo de los Bomberos de su comuna, les pedimos un mayor compromiso y menos palabras. Les pedimos una cooperación real y no un “vamos a ver qué podemos hacer”. Y que entiendan que cuando pedimos, no pedimos para nosotros, sino para seguir sirviendo a nuestra comunidad”.
