Con una masiva participación contó la cena con la cual, la Cámara de Comercio de Pichilemu, conmemoró los cuarenta años de su fundación ocurrida el 30 de Junio de 1967.
Más de ciento treinta comensales -en el establecimiento «La Picada del Negro»- encabezados por el presidente de la asociación gremial – Fernando Pavez Silva-
y del Presidente de la Confederación del Comercio Detallista de Chile, el dirigente colchaguino Rafael Cumsille Zapapa, participaron en el festejo realizado el 30 de junio pasado. Asistieron los concejales Roberto Córdova Carreño y Aldo Polanco Contreras, en tanto otras autoridades no se les vio ni la nariz, pese a que algunos habían confirmado su asistencia.
En la ocasión -donde no estuvo ausente el recuerdo para algunos fundadores y ex dirigentes ya idos, como Lautaro Arce Vásquez, Flavia Muñoz Valenzuela- hubo un minuto de silencio para un comerciante -de los antiguos- que falleció la semana pasada: Manuel Antonio Cortés Calderón.
Igualmente, hubo un reconocimiento en forma conjunta con la Radio Entre Olas, a diversos socios como también a colaboradores del comercio o la actividad. Es así, como en primer lugar se distinguió al socio fundador y ex dirigente, Osvaldo Vidal Vidal; al socio cooperador y dirigente Héctor Urzúa Cornejo; al socio y ex alcalde Orlando Cornejo Bustamante; a la socia y dirigente con ocho años de secretaria, Lucila Parraguéz Galarce; al fiel y antiguo dependiente del Almacén Polanco, Luis Soto Valenzuela; a las secretarias de las empresas Electrón y Servitec, Jéssica Hidalgo Clavijo y Mary Jorquera, respectivamente, como colaboradoras; al antiguo trabajador radial, el radiocontrolador, locutor y socio cooperador, Ricardo Calderón Vargas; culminando con una distinción al dirigente nacional, Rafael Cumsille por sus también cuarenta años de dirigente en el gremialismo , quien aparte de agradecer el galardón, destacó con su reconocida locuacidad, vehemencia y la sabiduría de un viejo dirigente, como pocos, la trayectoria del comercio pichilemino que él siempre ha tenido muy cerca y atento a su devenir y gestión, recordando avatares y anécdotas de mil batallas, en una aplaudida intervención.
También hubo las palabras de saludo del anfitrión, Fernando Pavez, quien junto con resaltar el momento que está viviendo la Cámara de Comercio en sus cuatro décadas, agradeció la presencia de los invitados especiales y de sus consocios por darle el realce a la significativa ocasión.
Como es tradición, tras la cena, hubo bailables hasta altas horas de la madrugada, donde prácticamente algunos bailaron hasta el «koala», mientras otros se tomaron «hasta la presión y transpiración».
CUARENTA AÑOS CONMEMORÓ LA CÁMARA DE COMERCIO DEL BALNEARIO

