Fuente: www.elrancaguino.cl
Foto: Nico Carrasco
“La investigación nosotros no la hemos cerrado. El caso sigue abierto”, fueron las palabras tajantes que la tarde de ayer pronunció el fiscal jefe de Pichilemu, Jorge Mena. La investigación se abocará principalmente en determinar si el hasta ahora único autor de la muerte del empresario textil Mauricio Saba, Mario Lecaros y quien fue encontrado muerto al interior de un departamento en Viña del Mar el pasado jueves, actuó solo o en complicidad en la muerte del dueño de la marca Montaña Sport. Dicha afirmación del fiscal que encabeza la investigación del asesinato del empresario santiaguino es confirmada por fuentes policiales, quienes afirman que a pesar que se dio con el paradero del autor de los 3 disparos, aun quedan varias aristas por analizar. Una de ellas dice relación con la participación de más personas en el caso, ya sea como coautores, encubridores o cómplices. “Para nosotros el caso sigue abierto para saber si hay más personas involucradas que tienen responsabilidad en carácter de cómplices o encubridores”, señaló el abogado del Ministerio Público en conversación con El Rancagüino. Asimismo, Jorge Mena afirmó que la línea de investigación sigue siendo el robo con homicidio, y con ello “descartar si hay más personas involucradas que la persona que falleció (Mario Lecaros). Es determinar si actuó sólo o hay un coautor”, dijo el fiscal.
PERICIAS A DINERO Y EVIDENCIAS
El próximo paso de la policía civil será periciar las evidencias que se obtuvieron desde el departamento de Avenida Marina 70, en el edificio El Faro de Viña del Mar. Desde el inmueble donde fue encontrado el cuerpo de quien para la PDI y la Fiscalía es el autor del asesinato de Saba, se rescató el arma homicida –un cuchillo cartonero– el dinero encontrado en poder de Lecaros –$2,3 millones en efectivo– el notebook que siempre portaba consigo, un pendrive, las cartas dejadas por el suicida y tres teléfonos celulares, dos de los cuales eran portados por él. El tercer aparato estaba en manos de su amiga, quien lo habría acompañado solamente, según declaró a la policía, por solicitud del propio Lecaros a raíz de una depresión que le aquejaba. La mujer arrendó el departamento por 15 días cancelando por ello 300 mil pesos en dinero.
Junto a ello, el fiscal instruyó para que los $2,3 millones que fueron hallados al interior del departamento, y que corresponderían a los girados por Saba el lunes 29 de diciembre pasado desde una sucursal bancaria en Santa Cruz, sean periciados a fin de determinar aquella hipótesis. “El dinero se va a periciar con el banco para que (la entidad bancaria) nos señale si su número de serie corresponde a los billetes sustraídos (a Mauricio Saba). Creo que el lunes (mañana) voy a tener visión respecto a eso”, afirmó el fiscal Mena. ¿El resto del dinero? “No tenemos ningún antecedente de dónde pueda estar la otra parte del dinero. Estamos tratando de ubicarla”, agregó luego.
AMIGA DE LECAROS, POR EL MOMENTO SÓLO TESTIGO
El Rancagüino consultó a quien encabeza la investigación que cuál es la calidad que presenta la mujer de 27 años que acompañaba a Mario Lecaros en la Quinta región, y que fue quien dio aviso del suicidio de Lecaros.
“La amiga está en calidad de testigo mientras tanto, aunque puede variar su situación, pero por el momento está en calidad de testigo”. “Se investiga de igual manera si tiene alguna implicancia en el hecho”, declaró el fiscal del caso.
Tanto la Fiscalía como la policía descartaron el retrato hablado que fue dado a conocer el martes 6. “Esa línea policialmente está descartada”, dice Jorge Mena. ¿Nuevas identidades? “No hay con las que se esté trabajando”, afirmó luego.
El arma homicida –ayer se confirmó que corresponde a un revólver calibre 32– y el teléfono celular del dueño de El Faro de Apoquindo son tareas pendientes para la PDI. Fuentes policiales afirmaron que el aparato de Saba está siendo monitoreado, y el arma también es buscada. “Estamos tratando de buscar el arma (homicida) y el teléfono celular (de Saba). La policía está trabajando en eso”, fueron las palabras finales del fiscal Jorge Mena.
