UNÁNIME DECISIÓN: CENTRO DE HIJOS Y AMIGOS DE PICHILEMU SE REACTIVA SÍ O SÍ
Aunque el número de personas comprometidas era mayor, los petreles y gaviotas pichileminas que residen en diferentes ciudades del país se reunieron tal como estaba proyectado desde semanas, en el Restaurant ”Pin-Pon”, en Pichilemu.
Once llegaron a la cita. Entre ellos: Pedro Avendaño Mella (cirujano dentista), Lautaro Arce y Verónica Ilabaca (dibujante técnico y tecnólogo médico), Manuel Pacheco Vargas (ingeniero textil), Patricio Saldías González (representaciones comerciales), Francisca Calderón y Miguel Galaz Morales (ejecutiva bancaria y técnico en construcción), Eugenio González Vargas (artesano y pintor), José Leiva Urzúa (ejecutivo bancario), Hernán Martínez Morales (publicista) y Washington Saldías González (editor).
Aparte de degustar unas exquisitas empanadas de horno y trago de vino, la reunión de camaradería dejó sentado el interés unánime de reflotar el Centro de Hijos y Amigos de Pichilemu, institución que fuera creada en un día como hoy, en el año 1978.
Y junto con ellos una serie de acuerdos tácitos en acciones que los llevará a crear el propio sitio web de esta agrupación y que para efectos de marketing tendrá un nombre de fantasía que quedará inserto en los estatutos de la institución; tema que quedó en manos de Pedro Avendaño y Hernán Martínez.
Asimismo, otra comisión quedó con la misión de organizar para el tercer fin de semana de octubre próximo una Convivencia con adhesión a fin de reunir recursos para financiar otros proyectos dados a conocer, tanto de mediano plazo como a largo plazo y donde se quiere comprometer la participación de los cientos de pichileminos que están radicados por razones de trabajo en diversas ciudades del país. Ideas e iniciativas que se irán dando a conocer más adelante a la opinión pública.
Ya estaremos informando más antecedentes y detalles junto con extenderles, de a poco, la invitación a todos quienes manifiesten –también- un real interés de pertenecer a esta institución que desde 1978 a 1982 aproximadamente, realizó actividades en beneficio de los habitantes de la comuna.
Institución que desde esa fecha hasta hoy se sumió en un profundo sueño invernal, del cual recién hoy se sacudió y quiere constituirse en un ente que –Dios mediante- recupere con acciones concretas los objetivos establecidos hace más de treinta años y que se reformularán con una nueva “visión” y “misión”.
En esta tarea quedamos todos los presentes comprometidos en hacer aportes para someter, en una reuni junto a los estatutos la aprobación de quienes quieran ser parte de la institución.
Es así como, los antiguos estatutos y otros documentos se empezarán a distribuir a aquellos pichileminos que residen en distintos puntos del país, como también a los amigos que, conocedores de Pichilemu, sienten afectivamente que pueden aportar en proyectos e ideas comunes.