UNA TREINTENA DE HISTÓRICOS PIONEROS DEL PROYECTO “ESCONDIDA” TUVIERON MEMORABLE ENCUENTRO

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A 30 años de su descubrimiento

UNA TREINTENA DE HISTÓRICOS PIONEROS DEL PROYECTO “ESCONDIDA” TUVIERON MEMORABLE ENCUENTRO

–  No nos equivocamos cuando hace unos días dijimos que, seguramente, el encuentro de pioneros e históricos trabajadores del proyecto Escondida que se reunirían el 19 de Marzo en un establecimiento antofagastino sería memorable. Y, afortunadamente, ¡así fue!

– Tres pichileminos, en distintas épocas, trabajamos en la “Escondida”: Eduardo Labarca Vidal –primero- luego “pichilemunews” y Roberto Córdova Carreño (actual alcalde de Pichilemu). El primero y el último, a través de firmas contratistas.

Anoche en un conocido local de la ciudad nortina de Antofagasta, “El Arrayan”, fue el escenario elegido por los organizadores de la iniciativa –Ronaldo Maita Ortuño y Marcelo Bonilla Vidal- para reunir al personal de Minera UTAH Inc. que aquel año de 1981 exploraba al interior de Antofagasta en busca de una nueva veta de mineral. Y que finalmente –al cabo del sexto sondaje- impactó en una rica veta del metal cuprífero que, al principio –como lo supe anoche de voz de Aliro Ávalos- NO LO QUERÍAN CREER. Un tema que merece unas palabras aparte, más adelante.

El solo ver y reconocer a quienes estaban y/o a quienes seguían llegando a la cita, era un cúmulo de emociones que se fueron fundiendo en un apretón de manos y en un efusivo abrazo. Y si bien salían las palabras de rigor, éstas estaban cargadas de emoción, al tiempo que de alegría.

Si estamos tratando de trasuntar estas impresiones es porque –finalmente- pudimos Dios mediante sortear una serie de obstáculos para llegar a la cita.

En nuestro caso, llegamos al lugar cuando ya había al menos unos doce ex compañeros que estaban en dos grupos compartiendo y a la espera de que llegaran todos los demás “confirmados” a la reunión.

Instintivamente me fui, primero, al grupo en que alguien nos nombró y sin reconocerlo nos fundimos en un abrazo y luego a cada uno. Eran –después supe que quien me nombró era el topógrafo Mario Urqueta Julio- los muestreros Sixto Segovia Aguirre y Gonzalo Carvajal Alfaro, el radio operador Jorge Villalón Núñez (el “Jerry”), el dibujante Héctor Aguilera (el“Paleto”, su prenda favorita) y el técnico eléctrico Germán Morales (el “220”).

Enseguida distinguimos a dos damas, la administrativa Susana y la geóloga Nilda Lay G. –que se casó posteriormente con el geólogo Chris Ford- y hacia allá nos dirigimos para saludarlas. Saludamos al propio Chris, al lado el geólogo americano  Randy Jones –que, sorpresa, se había casado con la administrativa Susana- también al Ingeniero Nivaldo Rojas, al dibujante Gabriel Zúñiga Castro, al “cokkie” Jaime Rivera Soublett y a un par de personas que no alcancé a conocer antes de 1983, fecha en que dejamos de pertenecer –junto a nueve compañeros más- el día 28 de diciembre de ese año.

En los minutos siguientes saludamos a los organizadores –Ronald y Marcelo- quienes en ese momento estaban en los preparativos y detalles finales del encuentro.

Posteriormente, llegó nada menos que Pat Burns, el geólogo canadiense y Jefe del Proyecto durante los primeros años, quien uno a uno nos fue saludando.

Más adelante se fueron integrando, Ernesto Ríos Carvajal -el jefe del grupo de dibujantes- el dibujante Aliro Ávalos Obregón, el administrativo Raúl Díaz Núñez, el dibujante Wilson Vega Ávila, los hermanos y choferes Patricio, Guillermo y Reinaldo Arias Ortiz.

Ya cuando estábamos sentados a la mesa, apareció el dibujante  Francisco “Pancho” Prieto Caroca, quien es el padre del arquero de igual nombre, del Colo Colo.

Tras él, uno o dos más que tampoco alcancé a conocer, en mi tiempo en el proyecto.

Pocos minutos antes de compartir la cena, Marcelo Bonilla –uno de los organizadores de la cita- manifestó el motivo de ese encuentro y todos los esfuerzos que se hicieron por contactar a más de medio centenar de pioneros y ex compañeros de trabajo. En algunos con resultados positivos y en otros casos –hasta ahora- sin ninguna información.

Enseguida, Marcelo dio la palabra al ingeniero Nivaldo (con “v”) Rojas, quien viajó desde México, manifestando su agrado y agradeciendo la iniciativa de hacer el encuentro.

Y, a continuación, siguió Pat Burns quien radicado en Salta, Argentina -ya casado y con cuatro hijos sigue ligado a proyectos mineros-manifestó también el enorme agrado de estar ahí y que en muchas ocasiones se preguntaba por qué no realizar una reunión de estas características; proponiendo acto seguido realizarlas más seguido y ojala, con más participantes.

Asimismo, manifestó –de cierto modo- la falta de reconocimiento a todo ese numeroso grupo de trabajo que se fue incrementando en el tiempo y que fue importante a que el proyecto fuera creciendo a tal punto que, posteriormente, a raíz de la importancia del mineral cuantificado, como su alta ley, se convirtiera en la Mina “Escondida” y que al cabo del ciclo de exploración, en el año 1991 se iniciara el proceso de explotación, transformándose en el mineral de cobre más grande del mundo.

Burns aclaró: “No lo digo como una manera de hacernos famosos, sino simplemente, como una manera de reflejar el grado de desconocimiento que existe hacia esa primera fase …”

Posteriormente, en las postrimerías de la sobremesa, Burns insistió en la necesidad de volver a reunirnos y a no esperar tantos años como los pasados. Al punto que hubo consenso en hacerlo en marzo del próximo año y darnos –cada uno- el tiempo de ubicar a los que faltaron a la cita. Igualmente, la disposición de ver el modo –dándose varias ideas- de que quienes eventualmente tengan problemas para asistir, buscar cómo facilitarles su concurrencia; todo lo cual se les manifestará a quienes tengan problemas para ello.

Pero volviendo en el desarrollo cronológico de esta cena y encuentro, previo a iniciarla, Marcelo Bonilla presentó un “power point” con música ad hoc (Los Jaivas) de una serie de fotografías en donde aparecíamos prácticamente todos los presentes y varios ausentes en diferentes instancias de esos primeros años (1981 en adelante), fotografías que tenían el aporte de quienes fuimos enviando esos recuerdos para compartirlos. Y, aparte, de esas fotografías mostradas, unas tantas que en el transcurso de la cena fueron circulando de mano en mano. Y cuya dueña –Susana, esposa del geológo norteamericano Randy Jones- quedó en scanearlas para enviarlas vía mail.

También salió –como muchos otros, al momento de reconocerlos en las fotografías- los nombres de la geóloga Christine Mongard, quien envió como regalo al encuentro unas fotografías grupales y un saludo a quienes se iban a reunir.

También conocimos de las excusas, por la misma vía, de los geólogos José Perelló y Ricardo Muhr, ambos importantes ejecutivos de Antofagasta Minerals, quienes no pudieron zafarse de respectivos compromisos.

Al igual que otros, también no pudieron estar pese a su interés de estar presente.

Tras la cena que –se inicio con un cóctel y aperitivos- hubo plato de fondo a elección, postre, café y bajativos, vinieron las conversaciones entre unos y otros donde pudimos compartir durante algunos minutos, al tiempo que se formaban grupos para posar en fotos de recuerdos de la ocasión. Todos con la inmensa alegría de estar viviendo esos momentos al tiempo que –de vez en cuando- salían algunos recuerdos de anécdotas y chascarros protagonizados por unos y otros; lo que le dio el toque de cordialidad, camaradería y de sinceridad.

Fue justamente este último sentimiento en donde –aparte del saludo cordial con el ex Jefe del Proyecto, el geólogo canadiense Pat Burns- éste manifestó a “pichilemunews” que pese a instantes que empañaron nuestra relación de trabajo, dijo que para él todo era parte del pasado y que antes de acudir a la cita, había pensado y se había preguntado ¿vendrá Washington?; lo que se cumplió, pues al igual como él lo expresó, si bien no se olvidan, son cosas del pasado y que se recuerdan sin rencor …

Varias fotografías del momento dan cuenta de que, aparte de tallas y bromas de algunos, que no hay animosidad de ningún tipo entre ambos.

¿Sobre qué se trata este asunto? Ya lo diremos … (aunque ese hecho ya lo contamos casi con todos los detalles en “pichilemunews” y se puede buscar en el google, poniendo:  NACIONALIZACIÓN DEL COBRE, LA “ESCONDIDA” Y LA JUSTICIA). Ese artículo lo publicamos el domingo 22 de Junio de 2008.

No podemos dejar de recordar los momentos en que hicimos un brindis especial: Ya nos habíamos recordado de Jim Bratt, el gerente general de Utah Inc., en Chile, cuando aparecía en las fotografías mostradas en el power point.

Estábamos disfrutando de la cena, cuando en un momento Chris Ford nos pide un minuto de atención y nos dice: “Tengo a Jim Bratt (en Estados Unidos) al teléfono y le he contado de esta reunión y les envía un gran saludo. Brindemos por él, al tiempo que todos levantamos nuestras copas haciendo y diciendo ¡¡SALUD!!

Fue un corto instante, pero de emoción al expresarle a ese hombre, a través de esa sencilla palabra, nuestro aprecio y reconocimiento hacia su labor.

En mi caso personal, fue quien me entrevistó en las oficinas de Santiago, en el transcurso del mes de septiembre de 1981 y, el 1ºde octubre estaba subiendo al Campamento “Escondida”, a 180 kms. al sur este de la ciudad de Antofagasta.

Previo a ser contratado ahí como dibujante técnico, estábamos trabajando en la Universidad de Chile.

Cuando llegué al campamento había un solo dibujante –Danilo Vera, mejillonino- luego apareció Francisco Prieto, Gabriel Zuñiga, Ernesto Ríos, Marcelo Bonilla, Jaime Godoy, Héctor Aguilera y Wilson Vega.

DESCUBRIMIENTO

Detalles ignorados hasta ahora, conocí anoche al conversar con Aliro Ávalos, quien era uno de los profesionales que tuvo –junto a otros- labores de exploración y que desembocaron con el descubrimiento del mineral en el lugar, al cabo del sexto sondaje.

Ahí en donde se decidió hacer el sondaje, por rotación, era el Nº 6. Cuando se llevaron las muestras el día 13 de marzo de 1981 a Antofagasta para el respectivo análisis químico del material recolectado, el profesional a cargo de esa tarea le dijo al Jefe de las Exploraciones que el análisis daba un alto porcentaje de cobre, no quedó convencido de inmediato, sino luego de dos análisis más, en donde le dio una serie de instrucciones para que, sucesivamente, los análisis no tuvieran un manto de duda. Así se hizo, y los tres análisis coincidieron con alto porcentaje de cobre: Se había “dado” justo el pencazo a la veta; lo que tras informarse a Santiago y a California, se autorizaron más sondajes, los que estaban a punto de suspenderse en el lugar, luego de que los cinco primeros no arrojaban resultados auspiciosos.

Fue el Hoyo 6 el que dio “en el blanco” en las faldas del Cerro Colorado, frente a la Estación “Zaldivar” del Ferrocarril Antofagasta a Salta.

Muchos otros aspectos e impresiones se podrían contar de este encuentro, pero –por ahora- quedamos hasta acá, no sin antes anunciar que a medida que subamos las fotografías, se verán a personas canosas, la mayoría, varios con ponchera incluida, con pelo ralo y unos bastante pelados; pero todos con una vida y orgullo íntimo de ser, incuestionablemente, cada uno, “pioneros” en el proyecto “Escondida”, hoy la Mina “Escondida”, que es actualmente por sus reservas la más grande del mundo.                   

 


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