LA VELATÓN Y OTRAS ACTIVIDADES RECORDATORIAS POR ASESINATO DE JOSÉ RUBAU

LA VELATÓN Y OTRAS ACTIVIDADES RECORDATORIAS POR ASESINATO DE JOSÉ RUBAU

Cuando aún están ardiendo las velas que pichileminos encendieron hace unas horas en recuerdo de la trágica partida de don José Rubau, a manos de cobardes, uno de sus hijos, Jordi –el portavoz de la familia- nos envío el texto que elaboró con motivo del segundo aniversario de la muerte de su progenitor en Pichilemu.

Además, el mismo texto que más adelante reproducimos textual e in extenso, lo envió en archivo mp3, en donde lo lee, con música de fondo, seguramente de su autoría.

La Velatón –que es la actividad a la que nos estamos refiriendo- contó con una importante cantidad de personas en la calle Manuel Montt, en el tramo entre Avenida Ortúzar y Angel Gaete, un sector que el desaparecido ciudadano español –a la vez con ciudadanía chilena- recorría casi a diario para estacionar su automóvil y caminar unos pasos a su Oficina donde ejercía el Corretaje de Propiedades.

En la ocasión, según nos refiere el director de radio “Entre Olas” FM, aparte de exhibirse fotografías del empresario en un telón instalado ex profeso, se escuchó música compuesta por su hijo Jordi Rubau. Asimismo, hasta el momento del despacho, hablaron tres ciudadanos: Caduzzi Salas, Lia Lazo y Luis Cáceres. Los dos primeros dieron testimonios de vida y de entrega hacia la comunidad pichilemina en las acciones y gestiones por solucionar el problema medio ambiental de Pichilemu, donde ambos –como muchos otros, entre los que nos contamos- trabajaron junto a él. Y el tercero, como profesional en el rubro computación en donde le prestó servicios.

Consultamos por la participación del dirigente Luis Fernando Pavez, presidente de la Agrupación Ciudadana por un Pichilemu Limpio, de la cual fue socio fundador José Rubau, pero hasta ese momento “no se le veía”.

Si bien no estaba anunciada su participación, pensamos que lo haría, por cuanto en días pasados le consultamos a él –precisamente- sobre los dos años de la muerte de este socio y saber de la preocupación de la institución que preside, como también al empresario Luis Pavez (Servitec), en cuyas oficinas estaba la del desaparecido español.

No obstante, no hubo respuesta del dirigente y entendimos –quizás, como una razón- que se “guardaría” para referirse sobre el tema en esta ocasión.

Pero, al parecer ello no sucedió. Quizás lo haga mañana, o pasado.

CONSULTAS

Estimados:

Junto con saludar, molesto vuestra atención para consultarles sobre que se hará al cumplirse dos años de la muerte de don José Rubau Solés.

Algún acto conmemorativo, quizás una misa en su recuerdo, alguna declaración pública haciendo oír su preocupación y malestar por la demora en la investigación.

Don José era socio activo de la ACPL y haciendo justicia a su memoria quizás este pensando en hacerse parte interponiendo una querella en el Tribunal, una gestión que -según entendidos- seria crucial y única para poder acelerar las acciones de investigación.

O para la ACPL ya está olvidado el deleznable hecho cometido en contra de un asociado y se está preocupando solo de la «descontaminación de la laguna de Petrel», una de las mayores preocupaciones de don José Rubau.

Estoy preparando un artículo al respecto y con respuesta o no a estas interrogantes saldrán estas consultas.

Es por ello que agradecería una urgente respuesta.

Muy atentamente,

Washington Saldías G.

Socio fundador

En otras palabras quisimos darle espacio para que se explayara y contara –aparte de lo relacionado con el segundo aniversario de la muerte violenta del socio de la ACPL- de los afanes que animan a esta institución, cuyos alcances no solo eran medio ambientales, sino de más largo alcance en torno al Pichilemu que esperamos entregarle a las futuras generaciones, mucho mejor de los que era hasta ese instante.

Pero, somos pacientes y seguiremos a la espera de una respuesta a lo indicado.

Ahora, el texto anunciado y enviado hace unas horas desde España, donde residen parte de los familiares.

A DOS AÑOS DE LA MUERTE DE DON JOSÉ RUBAU

Desde el inicio de la humanidad que siempre se ha anhelado un deseo. Las sagradas escrituras ya hablaban de ello cuando en las puertas del paraíso sucedió la pelea a muerte en que llegado el momento Caín mató a Abel.

Recordemos la cita:

(Génesis 4:8-10) 8 Después de eso, Caín dijo a Abel su hermano: «Vamos allá al campo».De modo que aconteció que, mientras estaban en el campo, Caín procedió a atacar a Abel su hermano y a matarlo. 9 Más tarde Jehová dijo a Caín: «¿Dónde está Abel tu hermano?», y él dijo: «No sé. ¿Soy yo el guardián de mi hermano?». 10 A lo cual él dijo: «¿Qué has hecho? ¡Escucha! La sangre de tu hermano está clamando a mí desde el suelo”.

Este es, sin lugar a dudas, el documento redactado del primer suceso violento y crudo que ha habido en la historia de la humanidad y además entre dos personas de la misma sangre.

Tal vez por que nos cuesta de creer que los mismos hijos de Adán y Eva pudieran quitarse la vida.

¿No somos todos Hijos de un mismo Dios Padre Creador? ¿Por qué se mantiene la lucha entre Caín y Abel en nuestra memoria colectiva?

Los hechos aún hoy en día se repiten. Tristemente por que el anhelo de la humanidad desde los inicios de su existencia es el deseo de LA PAZ. Esta paz inalcanzable y que desafortunadamente necesitamos al ver que la sangre se sigue derramando en cualquier parte de nuestro planeta y más nos duele cuando es la de nuestros seres más queridos como lo fue mi padre, Sr. Don José Rubau Solés.

Por momentos, cuando llegan estas fechas, revivimos lo sucedido. Resurge una sensación de impotencia, o un deseo de venganza, de odio, como se dice: Ojo por ojo, diente por diente. Pero si siguiéramos esta premisa nada avanzaría para conseguir la PAZ. No debemos abandonar nuestros principios, los que mi padre nos inculcó a mí y a mis hermanos y que practicó con su gente. Dejemos así que la justicia haga su trabajo y confiemos en sus agentes.

Respetemos las leyes del Gobierno de Chile, pero sin dejar de respetar las leyes de Dios. Jesús dijo: «Dad, pues, al Cesar lo que es de Cesar y a Dios lo que es de Dios».

Retomando la historia de Caín y Abel, recordemos que sabiendo Yahvé lo que había ocurrido, castigó a Caín condenándolo a vagar por la tierra.

Por mi cuenta y por la de mi familia, no dejaremos de hacer lo que esté en nuestras manos y mantendremos la esperanza en vela para llegar al fin del trágico suceso.

Damos nuestros sinceros agradecimientos a todos y cada uno de ustedes que después de dos años de la muerte de Don José Rubau, QEPD, aún siguen fieles a su memoria con sus actos y sus muestras de apoyo estando presente en sus oraciones.


Total
0
Shares
Realiza una donación a la Enciclopedia Colchagüina para poder preservarla
Publicaciones relacionadas
Realiza una donación a la Enciclopedia Colchagüina para poder preservarla