Sr. Director,
Como veraneante, todos los años resulta muy molesto tener que soportar —y me imagino lo insoportable que debe resultar para locatarios y residentes del sector céntrico— la publicidad, a través de altoparlantes, que realiza una camioneta de la Disco Club 127, y otros locales nocturnos, en Pichilemu.
Lo primero que se me vino a la mente es que la municipalidad posiblemente ya ha tenido en cuenta este tipo de situaciones. Y así fue.
La Ordenanza sobre Ruidos Molestos, que entró en vigencia en enero de 2001, es clarísima. «[Queda estrictamente prohibido en toda la comuna] El uso de altoparlantes, radios, equipos y de cualquier instrumento musical capaz de producir sonidos al exterior, como medio de propaganda de los negocios». (Art 8, a.) La fiscalización está a cargo de inspectores municipales y Carabineros.
¿Por qué esta, y otras disposiciones de esta misma ordenanza, que es ley, no se cumplen? …
[pdf]http://web.archive.org/web/20151230045038/http://transparencia.pichilemu.cl/actos/ordenanza_ruidos_molestos.pdf[/pdf]Raimundo Pérez.