Manuel Gómez Vargas, un salvavidas, fue agredido físicamente y posteriormente detenido mientras cumplía con sus funciones de prevención y seguridad en la playa de Infiernillo. El incidente ocurrió este domingo alrededor de las 13:30 horas, cuando Gómez Vargas se encontraba realizando su recorrido habitual para verificar que las banderas de emergencia estuvieran correctamente colocadas.
Según relató su hermano, Hugo Gómez Vargas, a través de sus redes sociales, Manuel se percató de que un grupo de seis personas (tres hombres y tres mujeres) estaba retirando las banderas de su lugar. Al llamarles la atención, los individuos respondieron con insultos y agresiones físicas. A pesar de intentar defenderse, el salvavidas resultó gravemente lesionado, sufriendo la rotura de una pieza dental y múltiples golpes en la cabeza.
Hugo denunció que, tras la golpiza, su hermano fue detenido por Carabineros. Además, criticó la falta de presencia de las autoridades para proteger a Manuel, quien es un funcionario municipal dedicado a resguardar la seguridad de los bañistas. «¿Ahora con todo esto qué ganas le quedarán a mi hermano de trabajar en la playa si nadie vela por su seguridad?», cuestionó.
El alcalde de Pichilemu, Roberto Córdova, se refirió al incidente a través de sus redes sociales, expresando su preocupación por lo ocurrido. Indicó que fue informado del hecho alrededor de las 14:15 horas y que inmediatamente movilizó a los equipos municipales para brindar apoyo al salvavidas. Criticó la actitud de los funcionarios policiales, quienes se negaron a tomar declaraciones de los testigos municipales que presenciaron la agresión.
El salvavidas permanece detenido a la espera de un control de detención, que se realizará este lunes.